La vida continúa y un nuevo paro ha pasado en la República Argentina y el día después uno dice Bueno, a partir de hoy algo tendrá que modificarse o algo tendrá que cambiar.
Yo no creo que vaya a cambiar demasiado porque no tengo muy claro el motivo central de la discusión del día de ayer porque escucho a distintos intérpretes con distintas opiniones. Por supuesto que el paro para mí fue exitoso porque hay un condimento clave y fundamental y es la no posibilidad de tomar un transporte público.
Ayer, seis millones y medio de personas no pudieron tromba su tren, su subte o su colectivo o su avión, aquel que tenía algún tipo de tarea o algún tipo de movilidad es justo, no? Yo creo que tenemos que tener garantizado el transporte público para todos y luego cada uno en un país que es democrático y que constitucionalmente lo permite tomar la decisión, si adherir o no a un paro. Yo creo que hay muchos argentinos que hoy tienen ganas de parar porque la situación cambió sustancialmente. Yo no soy de los que cree que todo es un caos hace cinco meses y yo creo que todo está más dramático que el caos que vivimos desde hace décadas en la República Argentina y sin ningún atisbo de mejora, porque los números de todos son realmente dramáticos.
La pérdida del poder adquisitivo hoy es muy fuerte y hoy hay muchísimos argentinos que viven la realidad del dos mil veinticuatro con los salarios que se parecen más a los del dos mil veintitrés que a la actualización que tendrían que tener el dos mil veinticuatro. Pero qué cambia hoy? No cambia nada porque tenemos ocho millones de personas que están en negro, que no forman parte de ningún sindicato en la Argentina.
Un señor llamado Héctor Daer que admite aquí en Radio La Red, hablando con Facundo Pastor, que el paro fue político y no una reacción natural al ajuste económico que propuso el actual presidente en la campaña y que confirmó en el ejercicio del poder hoy que cumple cinco meses al frente de la gestión.
Pero con una equivocación, porque el señor Dae dice que tenemos un paro de índole político al afirmar que quieren discutir con Miley, que es el presidente elegido por voto popular.
El rumbo de la Argentina. El rumbo de la Argentina lo marcan siempre los presidentes Dude, Kirchner, Cristina Kirchner, Menem, Alfons La gente los vota por algo no vota a la CGT o a la izquierda, que tiene un dos porque anoche mi no me gusta. Obvio, podés protestar todo lo que se te dé la gana.
Podés tener ideas superados, todas las que se te dé la gana. Pero algún tipo de idea, porque la CGT, cuando vos le preguntás rápidamente, empieza con el paraguas del ajuste y, por supuesto, se sube al impuesto de las ganancias.
Pero la CGT y charlado acá con el señor Rubén Obrero, negoció con el Gobierno la reforma laboral. Esto lo tenemos absolutamente claro todo. Después no pudieron correr el paro porque era muy incómodo con las bases que iban a decir Che arreglamos con el Gobierno y por eso vamos a meter marcha atrás. No seguimos para adelante. Pero qué hicimos con el Gobierno?
Arreglamos la caja y la caja no se toca. Y esta es una muy mala noticia para todos los argentinos y para todas las personas que ayer hicieron de buena fe un paro, porque el sindicalismo va a tener los mismos privilegios de siempre, pero no te van a dar ningún tipo de ventaja.
Vos, que vas a elaborar todos los santos días y lucháis contra una paritaria y lucháis contra algún beneficio o lucháis para estar algún día en blanco, en un país donde hay ocho millones de personas que están en negro y donde el Estado argentino promueve en gran parte esta contratación informal e ilegal.
Qué le pidieron que no se toque la cuota sindical y el Gobierno aceptó que pidieron en algún momento en esa situación planteada que podan la ley de bases y de sesenta modificaciones que había a una reforma laboral que Argentina necesita con las mejores cabezas para pensar cómo generamos empleo que no se genera desde el dos mil once.
Buen empleo y bien pago, como dijo Cristina Fernández, de sesenta quedaron dieciséis. La prioridad fue la caja, la cuota sindical que la tienen asegurada y no se toca. Lo demás forma parte de la anécdota del acto de la descalificación el señor Moyano diciéndole viejo meado expert expe diciendo simio a Pablo Moyano Los tweets cansados de todos los días y de todos los paros habidos y por haber.
Pero hoy no va a cambiar absolutamente nada. Vamos a seguir con los ocho millones de trabajadores informales en la Argentina, con una ley laboral que es un signo de interrogación y con interpretaciones absolutamente antagónicas. Porque para la CGT fue un éxito.
Pero no vamos a ir en busca de otro paro en forma inmediata, porque la fórmula en cinco meses se gastó muy rápido y para el Gobierno fue un fracaso rotundo. Pasó el paro uno más.
Seguimos con los mismos problemas y con los mismos vicios de siempre. Seguimos hablando de las mismas cosas en la Argentina. Seguimos hablando de la caja sindical. Seguimos hablando del ajuste. Seguimos hablando de estos rostros que forman parte del sindicalismo argentino, que uno cuando los ve en algún momento, siente bronca porque dice sí, dónde está la democracia sindical.
Pero también siente algún tipo de compasión porque están grandes algunos y los vemos desde hace tantos años el señor Pedro San Beti, que maneja el rubro de pinturas. Cincuenta años al frente del gremio, No, no crea que cincuenta años, porque hoy cincuenta años so es un pibe.
El señor Amadeo J. Aquí en Buenos Aires, cuarenta y uno años al frente del mismo sindicato, el señor Hugo Moyano. Bueno, acá tenemos varios no. Treinta y siete años al frente de camioneros. Lo eligen, sí, lo eligen. Y cuando hay algún tipo de lío te plantan rápidamente una lista oficial paralela y se termina el problema. El señor Pablo Moyano hijo. Saben cuánto al frente de ahí, con el padre Veintiuno años Acuña, diecinueve años al frente de estaciones de servicio Vadell veinte años al frente de su Teba.
Dónde está la renovación? Héctor Daer. Veintitrés años al frente de Sanidad Walker Gerardo Martínez, treinta y cuatro años Andrés Rodríguez. Treinta y cuatro años en la UPC n ln Sheri Obras sanitarias treinta y ocho años. Luis Barrionuevo, gastronómicos treinta y nueve años y la aero navegación de entes privados, el señor Jorge Sansa, que Dios le ha dado una salud notable. Cuarenta y nueve años al frente del gremio.
Esta es la democracia sindical que tenemos en la Argentina y dependemos en gran medida de esta gente para decidir si paramos o no paramos un país o si paramos el transporte y la gente no puede viajar o no puede decidir libremente. Yo creo que este tipo de medida de fuerza hoy por hoy atrasa porque la sociedad argentina tiene un método mucho más genuino, mucho más auténtico y mucho más real que lo que sucedió en el día de ayer. Y saben cuándo pasó? Hace quince días, cuando la sociedad argentina le dijo a Javier, Miley y a su ministra Sandra Peto Vello no nos gusta el tema de la educación. ¿Cómo lo están tratando? No, no, no, no, no nos gusta el manejo de las universidades. No, no, no me gusta ir y que en la universidad no haya luz. No me gusta ir y que no haya un insumo para enseñarle a mi hijo que quiere recibirse de médico. ¿Cómo se hace? No, no nos gusta un millón de personas en la calle, con transporte público, a disposición de la gente, con subte, con colectivos, con trenes, con aviones, con lo que quieran.
La gente salió porque lo siente, no, porque está advertida, porque está amenazada porque está obligada porque está pateada o porque no tiene el transporte para moverse. Año dos mil veinticuatro Sociedad Argentina Quinientos mil en Buenos Aires.
Quinientos mil en todos los puntos de Argentina para decirle al Gobierno no nos gusta tu manejo en materia de educación. ¿Qué hizo el Gobierno al día siguiente?
Rector de la Universidad Nacional, ministra de capital humano, dialogando, buscando un encuentro buscando una fórmula con un millón de personas en la calle. El gobierno tomó nota este tipo de paros hoy, un día después, el Gobierno en su mundo, los sindicalistas contando a ver si tienen la cuota sindical, otra historia y otra argentina pasó el nueve. Llegó el diez cinco meses de Javier Milá y como presidente de la nación. Dos paros y ninguna ley.