La trágica muerte de una adolescente de 15 años, quien fue atacada por dos perros dogo en la provincia de Córdoba, dejó conmocionada a la comunidad. En medio de este doloroso suceso, un vecino valiente que intentó ayudar a la joven relató este martes los detalles del dramático episodio y expresó su profundo pesar por no haber podido hacer más para evitar la tragedia.
Marcelo, el vecino involucrado en el incidente, fue uno de los primeros en acudir al lugar e hizo todo lo posible por salvar a la adolescente. Sin embargo, uno de los perros también lo mordió en el rostro, lo que requirió que recibiera cinco puntos de sutura. En una entrevista con El Doce, Marcelo compartió sus sentimientos de impotencia y carga de conciencia al no poder hacer más en aquel momento.
Según relató Marcelo, se encontraba realizando un asado en su casa cuando uno de sus hijos le gritó desesperado que unos perros estaban atacando a una chica. Sin dudarlo, corrió hacia el lugar de los hechos y se encontró con una escena desgarradora. "Había mucha gente, pero todos parados, gente que gritaba, lloraba y filmaba", recordó.
El vecino explicó que tomó un palo de escoba y golpeó al perro que tenía a la chica sujetada por el cuello, pero el animal no reaccionaba. Otro vecino intervino y apuñaló al perro, mientras Marcelo continuaba golpeándolo con el palo, pero el perro no soltaba a la joven.
En medio del ataque, apareció otro perro dogo y comenzó a gruñirle y saltarle. Aunque Marcelo dio un paso atrás, el perro lo atacó y le mordió el rostro. A pesar de la herida profunda y la sangre, Marcelo no se percató de la gravedad de su lesión, ya que su única preocupación era salvar a Trinidad.
Una vez que los perros soltaron a la chica, Marcelo relató que esta se sentó, pero su aspecto era desfigurado y había sangre por todas partes. "Abrió los brazos como pidiendo ayuda y luego cayó al piso", lamentó.
Marcelo reflexionó sobre la situación, afirmando que este tipo de perros no deberían estar en la calle y que la comunidad no estaba preparada para enfrentar este tipo de incidentes. Al conocer que el dueño de los perros había sido denunciado previamente, expresó su decepción por la falta de acción, indicando: "Todas las cosas que fueron pasando fueron luces de alarma. Si él hubiera hecho algo, esto no hubiera ocurrido".