No vale cualquier cosa en una campaña política, salvo en la Argentina, donde cualquiera puede decir lo que se le ocurra, que nadie se escandaliza y poca repregunta muchas veces.
Hace pocas horas hubo otro traspié de Patricia Bullrich en materia económica; digo otro traspié porque venía de proponer el "blindaje" con dinero del fondo, tal cual lo hizo en su momento el gobierno De la Rúa, cosa de lo que hemos hablado y mucho la semana pasada. Ahora, en un programa de tele, dijo que si le toca ser presidenta va a ir con las cámaras de televisión; le va a proponer a los medios ir con las cámaras de televisión a mostrar que en el Banco Central no hay reservas.
"A corazón abierto le queremos decir a la gente cómo está el país", lo que pasa que me parece que vale la pena pararnos un minuto, por eso yo lo marcaba como otro traspié. Creo que Patricia sabe y tiene claro que el Banco Central es simplemente un custodio, un encargado de custodiar las reservas, que incluso son reservas que pueden estar depositadas en otro banco del mundo con el objetivo de generar algún rendimiento, algún interés.
De hecho, el Banco Central que algún otro candidato quiere dinamitar, tiene una carta orgánica. En esa carta orgánica hay reparos, por ejemplo, reparo de confidencialidad, de dónde el banco pone la guita, etc. A ver, está más que claro, creo que cualquiera y no hace falta saber mucho de economía, tiene claro que en su gran mayoría las reservas son activos digitalizados y no físicos.
Obvio que vende mucho la imagen o la metáfora o el eslogan "Le vamos a llevar una cámara de televisión a", tres puntos suspensivos a lo que acabás de escuchar, pero no vale todo. No vale.
Y todo porque obviamente, si hay alguien que está mirando por ahí verdaderamente cree que vos entrás a un lugar, a una bóveda gigante y la guita de todos nosotros no está. Eso no es así.
Y no vale todo, a pesar de que para algunos, evidentemente, por lo menos no sé si vale todo, pero vale falsear algunos datos para presentarse, posiblemente con mayor efectividad ante la gente.