El Ministerio de Seguridad de Santa Fe anunció este jueves el reemplazo de la jefa de la Unidad Regional II de Policía, Margarita Romero, por el actual subjefe, y se trata del décimo cambio de la cúpula de la fuerza en Rosario desde que el gobernador Omar Perotti asumió el cargo en 2019.

Quién es el nuevo jefe de la Policía de Rosario

La nueva conducción de la Policía de Rosario quedó a cargo del subjefe Adrián Reinaldo Galigani, y será secundado por Iván González quien también se desempeñaba como subdirector.

Mientras que Romero, que condujo hasta este jueves de la fuerza, pasará a ser jefa provincial de la Policía de Acción Táctica (PAT).

La carrera profesional dentro de la Policía llevó a Galigani a prestar servicios en el Comando Radioeléctrico (CRE) en diferentes comisarías, subcomisarías y seccionales de Rosario y ciudades aledañas.

También presto servicio como jefe departamento Judicial de Automotores Zona Oeste y de la "Agrupación Cuerpos", conformada por las Unidades de Infantería y Caballería en Villa Constitución, hasta alcanzar en octubre de 2022 la jerarquía de subjefe de Unidad en Rosario.

Por su parte, el subjefe González se desempeñó como jefe de Agrupación Unidades de Orden Público, de las que dependen todas las comisarías y las inspecciones zonales.

El reemplazo de Romero por su segundo constituye el décimo cambio de cúpula policial en Rosario desde el inicio del actual Gobierno provincial.

El primer jefe, el comisario Marcelo "Conejo" Gómez, solo duró cuatro días en el cargo, luego de que el entonces ministro de Seguridad, Marcelo Sain, lo desplazara en diciembre de 2020 de la conducción y lo denunciara penalmente por haber dejado sin custodia edificios públicos y puestos fijos de esta ciudad santafesina.

El recambio de Romero se produce, además, en medios de un recrudecimiento de la violencia en Rosario, y ante las duras críticas del intendente local, Pablo Javkin, a los servicios penitenciarios federal y provincial y a la Justicia de Ejecución Penal por recientes extorsiones a comerciantes desde las cárceles y por el insistente reclamo de falta de policías en las calles.