Después de que saliera a la luz que Sebastián Villa tenía un acuerdo verbal para unirse al Kasimpasa de Turquía, Boca advirtió sobre la posibilidad de presentar demandas ante la FIFA, lo que llevó al club turco a decidir no llevar a cabo su fichaje. Como consecuencia, el futbolista colombiano sigue sin tener un equipo al que pertenecer, mientras que el Xeneize sigue adelante con su intención de tomar medidas legales tanto a nivel local como internacional, a través de la FIFA.
En medio de la contienda legal entre Villa y Boca, se ha revelado que el Kasimpasa tenía la intención de incorporar al jugador como agente libre. Villa aseguró firmemente su posición de que su derecho a trabajar no había sido respetado, lo que lo llevó a exigir libre de obligaciones contractuales. El acuerdo, basado en una promesa verbal, tenía una duración de dos años. No obstante, en Boca sostenían que el contrato del jugador seguía siendo válido hasta diciembre de 2024. En este contexto, desde las oficinas de Boca en Brandsen 805 advirtieron que si Villa aceptaba ese contrato, presentarían demandas legales tanto contra él como contra el club.
Esta amenaza, junto con los cambios en las negociaciones impulsadas por el representante de Villa, provocaron que el Kasimpasa retirara su oferta y abandonara la idea de fichar al jugador. A pesar de esta decisión por parte del club turco, queda claro que el conflicto aún no ha llegado a su resolución.