Teniendo en cuenta esto que veo en los monitores de los canales de noticias, tratemos de modernizarnos un poquito en todo. En la Argentina.
Yo sé que estamos atados a cosas de otro tiempo y que insistimos muchas veces en estar mal en el mundo. En el mundo, cuando tenemos un éxodo como éste que hoy tiene la Argentina, los sistemas de peaje son mucho más ágiles y mucho más rápido. ¿Saben por qué? Porque uno tiene registrada una tarjeta de débito, una tarjeta de crédito o paga previamente.
Si no estaba bancarizado, cosa que tendríamos que estar los argentinos, casi todos y gracias a Dios hoy, con una cobertura social muy fuerte, hay muchísima gente que lo está también y ahí te descuentan el dinero y no estás parado frente a una cabina de peaje. Ocho mil cuatro horas Para hacerte difícil la vida hay que modernizarse.
Yo cuando escucho barrio nuevo cuando escucho a Acuña, cuando escucho a Daer, cuando escucho todas estas cosas de hace treinta y cuatro mil quinientos años, no avanzamos. No tenemos ley laboral nueva, no le damos un derecho a nadie. Nos quedamos con los derechos de unos pocos.
Tenemos un millón y pico de personas que automáticamente hoy pasarían a estar en blanco. Harían aportes. Permitirían que los jubilados no estén con una caja fundida como están en la Argentina.
Pero no, no toquemos nada, como si lo que no tenemos que tocar fuera. Bueno, porque si alguien me dice Che, esto no lo toquemos yo acepto, pero hay que ir por la modernidad. Hay que ir por los cambios. Hay que ir por los beneficios. Hay que darles derecho a la gente.
El que labura hoy tiene que tener una RT. Tiene que tener vacaciones. Tiene que tener aguinaldo, no estar mirando la carita de un circunstancial jefe del momento que le dice este mes te puedo o no te puedo dar nada. Si es buen tipo y si es mala persona, lo tiene ahí como se le da la gana.
Por favor, modernidad, haciendo colas hoy en los peajes y tardando un siglo para descansar cuando la gente está invirtiendo tiempo y dinero, modernicen.
El señor Facundo Moyano, que tiene otra cabeza sindical de estos tiempos, sabe y promueve este tipo de cosas porque estamos con un atraso bestial y lo vemos hoy con tránsito detenido, con gente que va a tardar seis, siete.
Y por más que yo les digo paciencia y le ponemos la mejor de las ondas, no hay derecho a restarle tiempo a la gente y hacer que su calidad de vida nunca mejore. Y hablando de calidad de vida, cada tres meses más o menos, repetimos un número que es el de la pobreza.
Pero hoy, dentro de este contexto, donde muchos de ustedes están con el chip bueno, me tomo unos días, la verdad que me lo merezco, porque son todos problemas y la verdad que es muy difícil hacer pie en la Argentina los datos del INDEC sobre la pobreza y lo que es nuestro mapa social en Argentina es dramático el Gobierno que se fue de Alberto Fernández y Cristina Fernández para todo el fanatismo que hay con esta gente, porque mucha gente viste el club de fans de Cristina. Todo es brillante y pareciera que el país se cae únicamente cuando no gobierna el Kirchnerismo.
La pobreza llegó al cuarenta y uno coma siete solamente en el segundo semestre del dos mil. Veintitrés veinte millones de argentinos pobres, veinte millones de argentinos pobres.
Pero hay más seis millones y medio de argentinos indigentes. Pero hay más. El sesenta de los chicos menores de catorce años son pobres. Y algo que para mí es mucho más grave, porque cuando escuchaba el señor Alberto Fernández diciendo que la Argentina uno de los grandes méritos de su gobierno era la tasa de empleo, les quiero contar que así como somos campeones mundiales de inflación, también tenemos una particularidad, porque la Argentina bajó el desempleo, pero subió a la pobreza.
Y ustedes dirán pues, cómo es esto en un país donde tenemos un cinco coma siete de personas solamente que están sin trabajo, que es un buen número, cómo hay tantos pobres y se dio como consecuencia de la inflación como consecuencia de la informalidad, como consecuencia que no queremos reformar nada.
Entonces, si hablamos de una reforma laboral, los señores sindicalistas de la edad de piedra que tenemos en la Argentina se ponen fastidiosos. La gente, aún teniendo trabajo en la Argentina, está en pobreza.
En algún momento, tener un trabajo en blanco en la Argentina era blindar la economía de una familia. Hoy ni siquiera eso bajó el desempleo y subió la pobreza, la historia de un fracaso que solamente lo conoce un país como el nuestro, Argentina.
Trabajadores en blanco. La mitad cobra menos de cuatrocientos cincuenta mil pesos en nuestro país. Son datos del mes de diciembre del año dos mil veintitrés. La cifra es menor que el valor de la canasta básica para una familia tipo.
Son datos de un dolor y de una falta de respeto a la sociedad argentina que se van a incrementar con estos tres meses de Javier, Miley y su Gobierno. Porque los números de mi ley vienen gravísimos porque los números de mi ley, algunos lo justifican desde bueno, hubo que hacer un sinceramente de una economía donde todo estaba pisado y donde todo era artificial.
Un día eso explota. Coincido. Ahora hay que ver de qué forma llevamos a cabo la intervención quirúrgica, porque yo siempre prefiero la anestesia para todo. Que me aconsejen, que me expliquen y que lo pase lo mejor posible.
El mal trago que tengo que pasar y saber si el resultado me garantiza algo, porque no siempre la operación nos garantiza un buen resultado más allá que en la Argentina.
Hay que hacerla sí o sí porque no se puede vivir con infracción porque no se puede seguir emitiendo para crear una situación artificial de vida que después estalla porque no se puede pagar una tarifa de luz.
Nosotros acá, en el amba, no los que nos escuchan en el interior, donde es más barato comer una hamburguesa que pagar una tarifa de la luz no pasa en el mundo. Y si alguien no puede demostrar que en la Argentina, con nuestras fórmulas, superamos lo que hacen en el mundo donde las cosas funcionan relativamente mejor lo patentamos.
Pero no hay ningún lugar en el mundo donde pagan la luz o mango, donde pagan el gas. Un mango donde la gente elude impuestos donde tenemos un número altísimo de personas que están en la informalidad total.
No, no lo hacen. No hubo un país en el mundo en plena guerra y en plena pandemia, que emitiendo lo que emitió, tenga la inflación de Argentina o haya dicho Che.
La emisión no produce inflación. Solamente lo decían acá algunos irresponsablemente pobreza. Cuarenta y uno coma siete segundo semestre de dos mil veintitrés, casi veinte millones de personas pobres con flecha para arriba y en aumento seis millones y medio de indigentes.
Seis millones cuatrocientos mil chicos pobres representa un aumento de cuatro dos en relación al cincuenta y cuatro Coma dos que teníamos en los primeros meses del año dos mil veintitrés. Vergonzoso.
Bajó el desempleo, subió la pobreza, la historia de un fracaso anunciado en un país con un sinfín de planes sociales. Imaginen Argentina sin asistencia a lo que sería un país netamente de pobres y una muy pequeña porción de gente teniendo calidad de vida y viviendo bien. Eso es lo que tenemos en el día de hoy, la radiografía de una situación vergonzosa.
Por eso me parece que tenemos que ser hoy durísimos con todos aquellos que tengan que ver cuando se destapan situaciones de corrupción con gente que toca alimentos de pobres medicamentos de pobres o inventa planes para pobres que no se los dan o inventan cooperativas bajo el paraguas de vamos a ayudar a los vulnerables y la guita se desvía o se desviaba.
Iba para otros caminos con muchos atajos de por medio. Ahí la justicia tendrá que ser implacable para armar un sistema social que proteja, que cuide y que tenga sensibilidad, que muchas veces por algún objeto del actual gobierno no los vemos y no los sentimos.