Enorme preocupación Desde el viernes les vengo diciendo porque estamos repletos de fugas en las comisarías de la ciudad y no lo resolvemos ahora.
Dos nuevos se escaparon y están prófugos de una comisaría de caballito. Una situación increíble, insólita, porque si se escapan de San Telmo, digo, estarán extremando todas las medidas en todas las comisarías para que no se escapen más.
Se les escapan en Valvanera se les escapan en caballito. Ojo con este tema, Ojo con este tema, que es grave. Hay en este momento once delincuentes que se escaparon de comisarías con causas por robo todos y no hay solución entre paréntesis.
Vuelvo a recordar. El peluquero asesino de hace dos semanas sigue prófugo. No sólo que deseo que vaya en cana por asesino, sino que marco lo vulnerable que es el sistema donde se escapan presos y donde se esconde gente y no los podemos atrapar ni resolver.
La situación. Número I debut con aprietes del sindicato de Trapito Me puede explicar alguien qué es esto?
Después de meses de trámites, un gremio autoproclamado se presentó en la plata sin autorización de la municipalidad que maneja el señor Julio Alac y liderado por un barra Fabián Gi, Nota ex barrabrava de Estudiantes de la Plata que cumplió una condena por homicidio.
El arranque no fue auspicioso porque hostigaron a una persona que no quiso sumarse a esta organización y lo echaron. Llegó la policía, hubo detenidos y se abrió. Se abrió una causa. Contravención. Alguien me puede explicar qué es esta payasada?
Barra delictiva de barras bravas o ex barras bravas Armando un sindicato de trapitos. Repito, no tiene autorización de la municipalidad de la Plata. Nada que ver, pero la justicia le tiene que poner un límite a todo este tipo de situaciones de apriete, de extorsión.
Qué es esto? Por favor, resuélvelo. Es una vergüenza. Un sindicato autoproclamado. Una cosa increíble.
Y vamos al tema dos. Yo creo que Argentina gasta mucho tiempo en cosas que no son importantes o enfocamos los temas hacia el lado.
Que no es importante ser el señor Venegas Lynch, que es diputado nacional hacia este planteo.
"A ver, yo no creo en la obligatoriedad de la educación. Yo particularmente no. Eso es la responsabilidad de los padres.
Vos, vos, a tu hijo le querés dar lo mejor y muchas veces puede pasar en la estancia y sobre todo en Argentina, que no te puedes dar el lujo de mandar a tu a tu hijo al colegio porque necesitás en el taller con el padre trabajando y no lo pueden mandar a la universidad. Entonces voy a decir bueno, si los padres están laburando, ese chico no va a tener derecho a la educación porque el padre necesita que esté laborando con él, Claro.
¿Cómo hacer el Estado que decís sobre el chico? ¿Cómo se te ocurre darle a un comité de burócrata la decisión de la educación?
¿A qué llamas Comité burócrata? ¿Al Estado? ¿Al Ministerio de Educación?"
Bueno, ayer, por supuesto, a partir de estas declaraciones, que yo no comparto en absoluto, se declaró todo un debate. Todo el mundo salió a contestar un escándalo de los tantos que nos tiene acostumbrados un grupo de políticos y periodistas twitteros en la Argentina.
Yo sí lo tengo que resumir. No le voy a gastar mucha energía en el diputado. Me quedo con lo que publicó la ministra, eh Sandra Peto, Velo, que dijo Hombres trabajando, niños estudiando en un país ideal que no es Argentina, porque esto no es lo importante para mí que este señor tenga esta opinión, porque este señor no es ni ministro de Educación ni este señor maneja los destinos de la Argentina, ni este señor es tan influyente como para creer que lo que él piensa es lo que pasa en la Argentina.
Yo correría el telón de la educación y en en vez de estar debatiendo a Venegas Lynch estaría muy preocupado. Primero diría no coincido con Venegas Lynch punto No gasto un minuto más en Venegas Lynch, pero sí gasto tiempo en ver qué pasa con la educación.
En la Argentina. El dieciséis por ciento de los jóvenes que entran a los seis años a una primaria terminan a los diecisiete o dieciocho en la secundaria, cuando en la Argentina supuestamente la educación es obligatoria.
Contrariamente a lo que piensa el señor Lynch, el dieciséis por ciento vergonzoso, vergonzoso. En la Argentina sabemos claramente que cuando hablamos de las pruebas de las pruebas Pizza, los chicos están como la mona.
Tres de cada diez chicos de quince años del segmento socioeconómico más alto no alcanza el nivel mínimo de lectura. En la Argentina no entienden lo que leen. Su comprensión de textos es menor a lo que hacen los estudiantes de la misma edad en Chile.
Aquel lado en Uruguay, acá enfrente, en Colombia, allá arriba, en Perú, un poquito más arriba en México y sólo superan a los de sus pares del mismo rango de República Dominicana, El Salvador, Guatemala y Paraguay. El resto nos pasan por arriba.
No estaría tan preocupado en lo que dice un diputado en una nota para tirar un título y que todos vayan corriendo atrás y generar una nueva grieta. Estaría preocupado porque este hallazgo en la Argentina contradice lo que es un efecto cuna según el cual hay una correlación directa entre el nivel económico que tiene un académico, un chico y el rendimiento escolar no sucede en la Argentina.
Estaría preocupado porque en el dos mil diecisiete las pruebas enseñar determinaron que el cuarenta por ciento de los nueve o dos nuevos docentes están por debajo del nivel promedio, tanto en lectura como en escritura. Vuelvo a repetir dos mil diecisiete.
Las pruebas a enseñar determinaron que el cuarenta por ciento de los nuevos maestros están por debajo del nivel promedio. Tanto lectura y escritura como en su criterio pedagógico.
Estaría preocupado porque en una Argentina con tantos problemas que tenemos hoy los chicos van primero a alimentarse y después a educarse a la escuela y los chicos hoy tendrían que ir a educarse y, complementariamente, tener una buena alimentación. Me parece que el señor Lynch nos permite ahondar un problema gravísimo que tenemos en la Argentina.
Nos fuimos a pique con la educación, después debatiremos si la pública, si la privada, cuál nos gusta más, si la podemos pagar, si no la podemos pagar, pero vuelvo a repetir. Tres de cada diez chicos en el mejor nivel socioeconómico no entienden nada.
El cincuenta por ciento de los chicos en la Argentina no sabe dividir y multiplicar y el cuarenta por ciento de los maestros nuevos tiene dificultades en lectura y en escritura, según las pruebas. Enseñar nos pasa por arriba arriba activa todos los países del continente, con excepción de Paraguay, de Guatemala, de El Salvador y de República Dominicana.
Y otro tema gravísimo porque el gobierno argentino me parece muy bien que vaya atrás de todos los Curros, pero me parece muy mal que mientras solucionamos el problema en la justicia y encontramos a los responsables, si hay curro de por medio, hay que seguir generando situaciones que son imprescindibles porque el Gobierno demoró la compra de catorce millones de libros escolares.
Sostiene que la gestión anterior había iniciado un proceso sin transparencia y que debió negociar para bajar el precio de los ejemplares. ¿Por qué? Porque lo que estaban comprando a través del Ministerio de Educación del Gobierno Krista, parece que pagaban diez mil mangos por unidad y no todos valen diez lucas.
Pero mientras analizamos esto y vemos si hay algún delincuente que se aprovechó de la educación, como algunos sí, pareciera que lo hicieron con Los Remedios, pareciera que lo hicieron con los comedores escolares. Mientras tanto, mientras tanto, el Gobierno, aún en esta situación, no puede hacer demora de nada.
Tiene que seguir adquiriendo y luego viendo cómo se soluciona, Porque los catorce millones de libros escolares que se demoraron no llegaron a las manos de los chicos, que es la importancia del caso. Y por eso tenemos los problemas que tenemos.
Números en rojo, ineficiencia a la hora de entender un texto, ineficiencia a la hora de multiplicar a la hora de dividir todo mal. El Gobierno tiene que investigar y si hay un curro, cortarlo y mandar a la justicia a quien esté afanando con la educación de los chicos.
Pero mientras tanto, los libros en poder de los alumnos en poder de los alumnos ojalá que esta frase, la cual no comparto, repito, los hombres trabajando y los chicos estudiando. Para mí ese lema sirva para entender lo mal que estamos en educación, lo flojo que están nuestros alumnos, lo mal que están algunos de nuestros docentes.
Ni que hablar de los pagos, ni que hablar de la estructura de algunos colegios es otro tema que hablaremos en otra oportunidad. Pero ojalá que lo de este diputado no sólo sirva para el debate dominguero twittero, sino que sirva para analizar uno de los pilares que tiene toda sociedad que pretende avanzar y estar en el primer plano, donde no está la Argentina en materia de educación