Si bien la vera no significa no se habla, tiene algún tipo de límite, supuestamente para que todos podamos apagar un poco la cabeza para poder reflexionar, para poder pensar en una Argentina donde estamos con las cabezas demasiado encendidas y con demasiadas preocupaciones.
Pero mañana comienza la veda y yo ayer les decía cuando hablábamos de esta locura que pasó en Rosario con estos sicarios y con toda esta gente internada tan peligrosa y con un policía muerto y una enfermera lastimada o cosas por el estilo que hoy vamos a hablar un poquito porque se termina la campaña.
Si me preguntan por sí o por no, qué me pareció el año electoral? Si me gustó? Digo no, la verdad que no, porque un país que tiene tantos inconvenientes es estar desde febrero dedicándonos todos los fines de semana a ver quién gana o deja de ganar en una provincia, por una gobernación, por una intendencia.
Después ir a una paso con lo caro que es esto.
Después ir a una elección lógica donde votamos por primera vez y nos fuimos a un balotaje.
Les digo la verdad.
La respuesta es no.
Si me preguntan por sí o por no, Si los argumentos que vivimos en toda la campaña no ahora solamente con dos candidatos, sino antes con cinco, me cubrieron las expectativas como ciudadano no.
Y como periodista tampoco, porque cuando se las tengo que transmitir o tratar de contarles a ustedes, ustedes sentirán que en muchas cosas han quedado huecos muy profundos.
En la Argentina.
Hoy no hablamos con claridad de los temas de todos los días.
No hay un solo candidato que nos haya seducido con la posibilidad de terminar con la inflación.
Alguien se lo contó? No.
Alguien les dijo cómo es.
Tampoco hay algún candidato en la Argentina cuando eran cinco y ahora, cuando son dos, que les habló de un plan potente para terminar con la inseguridad.
Hay algún que otro buen deseo, pero no veo un plan.
Hay un deseo y me parece que en éste coincidimos todos, que tenemos que entender que si la policía detiene y la justicia libera, vamos a estar siempre en punto muerto y vamos a seguir, lamentablemente contando personas fallecidas en la Argentina es innumerable la cantidad de gente que ha perdido la vida en casos insólitos en casos totalmente evitables. Por qué?
Porque los chorros, porque los delincuentes tendrían que haber estado presos y no lo hemos podido resolver.
En las últimas horas estuvimos discutiendo los inhibidores en las cárceles con informaciones cruzadas cuando ninguno tenía la información exacta.
Por qué en algún momento se levantó un inhibidor y por qué en algún momento el Gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández liberaron un número altísimo de presos bajo el contexto de la pandemia y no los volvieron a reincorporar a los penales donde tenían que estar.
Hoy sentimos y padecemos esa enorme inseguridad multiplicada por todos esos delincuentes que no volvieron donde tienen que estar, que en la cárcel, porque las condenas se cumplen en la cárcel.
No se cumplen en la calle ni con pulsera, como el caso de De Faria, que lo vimos en las últimas horas, que tienen ciento cincuenta kilómetros de radio para poder moverte.
Ciento cincuenta kilómetros.
Imagínate lo que te podés mover.
No, no tenés ningún problema porque no va a sonar nunca.
Algún candidato por el sí o por el no te dio tranquilidad explicándote cómo vamos a sortear el gravísimo caso que hoy conmueve la Argentina, que es cómo se nos metió el narcotráfico, no sólo en Rosario.
Acá hay barrios de emergencia donde las mamás están desesperadas porque los hijos no van a la escuela, van a los búnkers para ser soldaditos y para cobrar mucho más dinero que lo que le puede dar la mamá o un plan que le otorga el Gobierno.
Acá alguno de los candidatos nos contó por el sí o por el lo que más allá de sacar planes, en algún momento vamos a instalar otra vez a esa gran parte enorme de la sociedad que más o menos son dieciocho millones que cobran algún cheque del Estado a una sociedad de trabajo, a una sociedad bien paga a una sociedad donde trabajar signifique estar por lo menos eximido de la pobreza.
Me parece que no.
Hoy vemos el informe de la Universidad de Di Tella y es alarmante porque por la alta inflación la pobreza se ubica casi en cuarenta y tres por ciento y necesitas trescientos cuarenta y cinco mil pesos para no ser pobre.
Ayer mucha gente.
Cuando ve esta cifra, dice caía la pobreza y creo que soy clase media, no?
La clase media la hemos distorsionado, La hemos pulverizado.
Es la nuestra de los tiempos de los abuelos, la nuestra, de los tiempos, de nuestros viejos, de nuestros papás.
Pero no es la actual nuestra trescientos cuarenta y cinco mil y en ascenso.
Algún candidato por el sí o por el no te explicó cómo vamos a hacer para limitar a esos sindicalistas que paran todos los días las clases en la escuela pública y hace que no sepamos si podemos mandar o no a los chicos?
Algún candidato por el sí o por el no te explicó cómo vamos a hacer para recuperar los ochenta mil prófugos que hay dando vueltas por la Argentina, que tiene que estar en un penal y andan delinquiendo afuera y están todos sin cumplir con las condenas?
Algún candidato por el sí o por el no te explicó vos que sos mujer y vivís la violencia tremenda de una sociedad machista todavía muy fuerte en la Argentina, con números altísimos de femicidio, que si denuncias creemos que te pueden ayudar, te podés liberar y muchas veces denunciando Te encontrás después con la muerte o con un paso trágico como es la violencia por parte de un tipo.
Algún candidato por el sí o por el no te explicó cómo vas a hacer para que tu hijo no te esté rompiendo la cabeza diciéndose que diciéndote que se quiera vivir a otro país porque acá no tiene futuro.
Algún candidato por el sí o por el no te dijo cómo vamos a encaminar el tema de la salud para que tengamos turnos accesibles, para que tengamos medicamentos gratis para el que necesita y pago para el que los puede pagar?
Me parece que hay muchas cosas de las cuales no hablamos y terminamos siempre lo mismo en la campaña del miedo, en la campaña sucia en la campaña, donde vemos cosas en las redes que no son ciertas fotos de candidatos haciendo algo que no lo hicieron, fotos de candidatos diciendo algo que no dijeron.
Nos conformamos con eso o somos también cómplices como sociedad, que nos acostumbramos a la cultura del meme, de la descalificación, de la fake news, de la mentira?
Me parece que pedimos poco.
Me parece que pedimos poco y llegamos a un domingo crucial donde no elegimos, donde tenemos que seleccionar entre los dos que mayor cantidad de votos lograron.
Nada más y nada menos.
Para terminar el minuto el domingo hay que votar, guste o no guste, te guste masa o mi ley o no te guste masa o no te guste mi ley.
Hay que votar el fin de semana largo, las vacaciones, el sol, el descanso, si se puede, empezará en otro momento.
El domingo hay que votar.
Es una obligación por el respeto al sistema, por el respeto a la democracia y por el respeto a esos padres y a esos abuelos nuestros que durante muchísimo tiempo no pudieron decidir por ellos, sino que otros decidieron por ellos.
Y así no.