
Qué desagradable lo del señor Eduardo Bellini.
Vos sabés si le va mal a Javier Milei nos va a ir mal a todos los argentinos.
Si le va bien a Javier, Milei nos va a ir mejor a los argentinos.
Esta regla es aplicable a todos los presidentes de la democracia y a la decisión de la gente.
El señor Meli Boni no entiende que la gente votó y eligió acá.
Nadie impuso un gobierno después de un larguísimo año de elecciones y votemos o no votemos a ganador en un proceso democrático.
Tenemos que entender que tenemos que estar nosotros dentro de un propio sistema.
Qué podemos hacer como ciudadanos?
Discutir las medidas, no estar de acuerdo con las medidas, luchar para que determinadas medidas no se lleven a cabo.
Tratar de explicar que la medida que yo creo que es la buena tiene un fundamento, no un capricho o una grieta.
O porque en mil novecientos treinta y cuatro, porque en mil novecientos setenta y ocho, siempre mirando para atrás, pero es la democracia y muchas veces cuando hay alternancia acá hemos visto al señor viró, que ya tiene una causa que maneja el fiscal Tornelli, que dijo el disparate sublime de Aerolíneas Argentinas.
Después pidió disculpas. Por lo menos después.
Tuvimos dos o tres dislates más parecidos en las últimas horas y los hemos tenido en los últimos tiempos, donde nos tuvimos que acostumbrar a que pase algo que debe pasar siempre que los gobiernos empiezan un día y terminan cuatro años después, como pasó con el de Mauricio Macri.
Acá había mucha gente ansiosa, mucha gente apurada, como lo hay ahora, más allá que estamos en el mes de la transición final en un año que fue una transición espantosa para todos los argentinos, más allá que hoy estés molesto, caliente, fastidioso, porque ves pragmatismo, pero también ves improvisación.
O crees que como no están todos los nombres y todo el equipo ha conformado todas las medidas conocidas? Igual hay un tiempo.
Nadie le exige a un gobierno entrante que al otro día tenga todo el elenco armado.
Por supuesto que uno ve gente que entra, gente, que sale, lealtades, que se rompen, problemas que son de ellos y acuerdos que no sabemos si son acuerdos o eran simplemente apoyos.
Porque acá supuestamente los que salieron terceros de juntos por el cambio, lo que brindaban era un apoyo o una estrategia de fiscalización para que le vaya bien a Javier Mila.
Y hoy pareciera que hay un acuerdo que no se está cumpliendo porque algunos andan con caras largas pidiendo algunos cargos que supuestamente alguien había prometido o alguien había pedido.
Pero lo de eh Belliboni es de una irresponsabilidad absoluta que no lo tenemos que dejar pasar.
Hoy vamos a tener diez mil, quince mil, veinte mil piqueteros en la calle, gente que la tendríamos que tener en un proceso de capacitación para ver si un día salimos de esto y no lo digo.
La transición lo digo desde hace cuatro, cinco, seis, siete años, cuando esto era un paquete chico de gente y hoy es un infierno de personas que están sin actividad, sin tarea.
Acá hay un fiscal de la nación que encontró muchísimas irregularidades, mayor el número de lo que encontró el fiscal a la cantidad de planes eliminados.
Y algunos creen que hay que hacer un trabajo realmente minucioso acá para ver quién está cobrando el plan, por qué está cobrando el plan y si cobra el plan, si lo puede utilizar al ciento por ciento o alguien le está quitando dinero.
El señor Bell Boni tendría que estar deseando que este gobierno, que él no votó como mucha gente, no lo votó, le vaya bien para que nos vaya un poco mejor a todos, porque hoy estar deseando que le vaya mal a la Argentina es profundizar una pobreza del cuarenta por ciento es profundizar una indigencia de diez por ciento.
Es profundizar que un montón de chicos solamente van a las escuelas a comer y no educarse.
Es profundizar los problemas que tenemos hoy en muchas provincias argentinas, donde los números no dan y donde el déficit es un espanto y no saben si pueden pagar o no un aguinaldo.
Me parece que estamos confundidos y que tenemos que entender que la democracia es eso.
Hagan un repaso a cada uno de ustedes.
Cuántos presidentes que desde el ochenta y tres a la fecha no han votado fueron presidentes?
Te puede fastidiar, te puede doler, te puede generar una situación cómo votaron esto o por qué eligieron esto.
Pero es la democracia donde se gana y donde se pierde.
El que gana tiene el poder. El que pierde tendrá que reconvertirse o tratar de mirar por qué perdió. Por qué no lo eligieron? Por qué no lo votaron? Por qué lo pusieron? Segundo, tercero, cuarto o lo que sea, pero vuelvo a repetir en un país sano, en un paisano.
Este tipo de declaraciones no pasan desapercibidas y me parece que en el nuestro tenemos que empezar a prestar atención a este tipo de situaciones.
Gran desafío para el nuevo Gobierno. Hoy lo planteaba de Pablo. Los hombres líderes, los estadistas están por arriba de estos supuestos miedos que te quieren dar.
Te voy a cortar la calle, la cortan todos los días. Te voy a presionar para que no te salga una ley.
El Congreso casi no funcionó en lo que va del año, así que no creo que veamos situaciones muy diferentes a las actuales, tal vez más tensas, tal vez más agresivas en un país que necesita de diálogo, que necesita de ruptura, de grietas y de otro tipo de protagonismo.
De la gente que reclama cosas desde otro lugar exigiendo, pidiendo, poniendo los pies en la tierra.
Porque esta encuesta que hizo CB, que presentamos en el día de hoy, dice que un cincuenta y tres por ciento de la población habla de ajustes sin tocar la educación y la salud.
Un Veintiocho habla de un ajuste más severo y hablar de un ajuste.
La palabra ajuste es fea.
Significa intentar poner un orden dentro de un desorden generalizado en la economía argentina, donde hay gente que cobra planes que no los debe cobrar, donde hay gente que cobra en una tarjeta un dinero que no tiene que cobrar, donde hay un exceso de personas que no tienen funciones y cobran algo que no deben cobrar.
Y en una Argentina esencialmente muy, pero muy pobre, pero que se construye.
Vuelvo a repetir desde el diálogo, desde los consensos y entendiendo que el que gana gana por cuatro años, nueve y dieciocho de la mañana.
Aunque a BellIboni no le guste y nos dese lo peor de lo peor a todos los argentinos Vita no.